La campaña, que se desarrolló a través de las redes sociales con la etiqueta #DesnudosPorLaUCV, se inició dos horas después de la golpiza que opositores le propinaron a Muñoz, técnico en Informática, de 33 años, que cursa su segunda carrera en la universidad.
“Esas personas lo que hicieron fue un show mediático”, asevera convencido y explica que quienes acudieron a la UCV lo hicieron solo para rescatarlo y protegerlo.
A su juicio, el incidente se correspondía con un plan de victimización que permitió a los agresores ocultar el ataque contra Muñoz.
—¿Consideras, entonces, que esa agresión no existió?
—No, eso no existió. Eso fue una actividad montada por ellos.
Argumenta que el grupo opositor ya tenía a varios fotógrafos listos para registrar el evento con el desnudo y divulgar las imágenes.
Mientras que en su caso esos mismos fotógrafos, que lo rodeaban mientras lo golpeaban, evitaron que sus fotos circularan en las redes sociales.
Hasta ahora ni el joven que fue desnudado ni sus agresores han sido identificados. Ni siquiera se sabe a qué escuela pertenece.
El desfile de la muerte
Muñoz fue capturado por una turba de unas 50 personas frente al edificio de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (Faces).
Venía huyendo desde la Escuela de Trabajo Social, donde realizaban una especie de foro, luego de que otros estudiantes, incluyendo la dirigente Sairán Rivas, los señalaran como objetivo.
El grupo opositor estaba en un enfrentamiento con la policía en la entrada de Plaza Venezuela.
Allí lo golpearon con mucha saña mientras le decían que lo iban a matar por chavista y prometían someterlo a un “juicio popular”.
Luego lo levantaron y dijeron que lo llevarían fuera del campus para quemarlo. “Vamos a matarlo frente a la policía”, dijeron.
Ya Muñoz no podía caminar, por lo que lo llevaron a rastras por el pasillo que conduce al comedor y a la Escuela de Comunicación Social.
En ese lugar se detuvieron y la estudiante Tammy Suárez, presidenta del Centro de Estudiantes de Estudios Políticos, le dijo: “Veme a la cara maldito chavista. Hoy vas a morir porque ustedes son culpables de lo que está pasando”.
En ese momento algunos integrantes de la turba le comenzaron a ofrecer apoyo y lograron introducirlo a una ambulancia de los bomberos universitarios.
Sin embargo no fue fácil. William y la parte trasera de la ambulancia estaban bañados en gasolina. Uno de los bomberos debió confrontar la situación para salir del lugar.
Debieron ir al CDI de Chuao porque los venían persiguiendo y les bloquearon la vía de acceso al Hospital Universitario.
Ayer William confesó que tiene miedo por las amenazas que viene recibiendo y que ese jueves creyó que iba a morir.
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